Podría haberme quedado disfrutando del otoño europeo que recién comienza pero mi inquieto espíritu periodístico se niega a morir. Por esas cosas del destino empecé a estar cada vez más cerca de la noticia. Y no pude hacer oídos sordos. Encontrar a Rafael Garay, el economista que tantas veces entrevisté (me acuerdo que hasta hice un “Reporteros” con él
en Canal 13) se convirtió en una especie de obsesión . ¡Y era que no! si la historia supera con creces todo lo imaginable en cuanto a mentiras, engaños y traición.
Así que contra todo lo que dicta el sentido común, decidí darle un nuevo cariz a mi viaje por el mundo y cambié mi ruta para seguir los pasos de Rafael Garay en Rumania. Dado que ya no trabajo para ningún medio de comunicación, me lancé sola en esta aventura que estoy financiando de mi propio bolsillo. Ojalá salgan algunos pitutos!!!
La decisión de partir fue rápida así que no hubo ninguna posibilidad de planificar ni organizar nada. Estaba visitando a una amiga muy querida en Alemania así que lo primero que hice fue tratar de llegar desde Leipzig a Berlín. Tomé un bus que debía partir a las 10:30 pm, pero partió con mucho retraso. Me dejó a las 2 de la mañana en la estación de buses de la capital alemana. Al aeropuerto llegué a las 5 am y el vuelo a Bucarest salió a las 7:15 am. Comencé mi aventura tremendamente cansada y sin poder dormir. A estas alturas estoy temiendo ya lo que me espera.

Al llegar al aeropuerto de Bucarest (10:15 de mañana hora local) me entero que Garay nunca estuvo escondido en la capital rumana, ahí sólo viajó a sacar su certificado de soltería. Me tengo que mover rápido a Botosani, a unos 350 kilómetros al norte, en la región de Moldavia. Y desde ahí al poblado de Rachiti donde estaría la casa de los padres de la novia de Garay, la mujer que la prensa chilena conoce como Marya Sara.
Trato de no perder la calma y empiezo a preguntar cómo llegar a ese lugar tan alejado. Y cómo he podido comprobar durante tantas veces en mi viaje, los milagros y los ángeles existen. Hago la fila para comprar un boleto de bus que me lleve desde el aeropuerto hasta la estación de buses en el centro de Bucarest y conozco a Alex, un joven rumano que habla inglés y que será clave para ayudarme en estas primeras horas.

Aquí no usan el euro sino la moneda local que es el Lei así que debo cambiar. Resulta que Alex no sólo me paga el pasaje, él va en la misma dirección y me acompaña a la estación de buses, luego a cambiar dinero, a almorzar y me deja sentada en el bus con destino a Botosani, desde donde escribo estas líneas. Será un largo trayecto de más ocho horas. Lo único que quisiera es dormir un poco pero no puedo. Estoy cada vez mas cerca y no quiero perderme nada de esta odisea tras las pasos de Rafael Garay.
Estamos del otro lado de tu cumputadir siguiendo paso a paso….cuidate mucho pero sigue !!!!!
Gracias Pablo!!!!
Que buena, me encantó leerte, tienes una seguidora mas
Te vi en mucho gusto mucha suerte
No vi tu reportaje completo per tengo duda con la mamá de María. en el otro canal se veía una persona más maciza.
No vi tu reportaje completo per tengo duda con la mamá de María. en el otro canal se veía una persona más maciza.
Buenaaa anita.. seria un maravilloso acierto periodistico.. en canal 13 tienen a una chica buscandolo.. anoche contacto mostró los lugares tu tu dices.. la casa de los padres de la novia de garay… espero tengas mucho éxito ¡¡
Gracias. Lo veo difícil ya con seguir la historia me conformo!
Buena suerte en la busqueda!!! Ánimo!!!
Saludos desde Santiago Chile !! Buena suerte en la busqueda !!! ánimo!!!!
Muchas gracias Tamara
Te pasaste Anita exelente tus comentarios ojalá lo encuentres pronto.
Muchas gracias!!! Pero está bien difícil..